Promesa y compromiso



Cuando se conoce una persona,
todo suelen ser promesas,
y al convertirlo en compromiso,
se acompaña con palabras hermosas.

Palabras que resuenan,
alterando las pulsaciones,
cada vez que las pronuncias,
multiplicas las emociones.

Unas emociones cuando sientes,
que se fragua un compromiso,
sientes que se derrite el corazón,
sin pedirte permiso.

Permiso para sentir,
las mariposas revoloteando,
porque con las promesas,
solito se va cautivando.

Solitos al sonido adulador,
ya sea cantos de sirena,
o mirlo al amanecer,
que el sentimiento envenena.

Un sentimiento dormido,
que despierta a la vida,
cuando una promesa,
le compromete la ruta prohibida.

Una ruta marcada.
por un destino precioso,
donde nadie se puede escapar,
cumpliendo con el compromiso.

Porque los compromisos,
son fruto de las promesas,
que se hacen realidad,
cuando desean las cosas.

El desear la felicidad,
es un aliciente de la vida,
que todos los deseamos,
aunque pueda ser cosa prohibida.

Las cosas que están prohibidas,
se pueden conseguir con una promesa,
pero cuando mandan los sentimientos,
es el compromiso de una relación hermosa.

“Cuando una promesa viene de buenos sentimientos es una señal clara que se puede convertir en un firme compromiso para una relación hermosa”.

Miguel de la Mancha
(poeta y escritor)