«Nos deseamos»

Cuando nos deseamos,
esa bella sensación,
que nos produce el amor,
“así como nos amamos”.

Ese fuego interior,
que nos llena de satisfacción,
aunque el día fatídico,
“nos separe en el amor”.

Puede que disfrutemos,
noches locas de pasión,
deseamos que el día,
“tenga 50 horas para amarnos”.

Los días maravillosos,
se nos hacen cortos,
sintiendo cada momento,
“disfrutando cada minuto”.

Cada vez que te siento,
me provocas el deseo,
ese deseo intenso,
“de comerte beso a beso”.

Al besar tus labios,
siento un gran deseo,
de acariciar tu cuerpo,
“recorriéndolo por todos lados”.

Explorándolo tan sensual,
sin que pueda escapar,
un trocito de piel,
“al fuego de mis labios al pasar”.

Sedientos y llenos de fuego,
ese fuego del deseo,
que sentimos los dos,
“tanto tú como yo lo deseo”.

Deseamos tanto poseernos,
y comernos a besos,
en todo momento,
“felices y contentos”.

Ser los protagonistas,
de esta maravillosa,
historia de amor,
“desafío de nuestra vida”.

Para poder llegar a sentir,
que toda la noche,
y todo el día por seguir,
“esta aventura dichosa por vivir”.

Atrapados en la lujuria,
que tenemos los dos,
cuanto más “te amo”,
“mucho más te deseo”.

Ese deseo insaciable,
de devorarte completa,
hasta extenuarte en el éxtasis,
“aunque el tiempo nos apremie”.

Debemos de aprovechar,
que no acabe el momento,
viviendo este deseo insaciable,
“aunque nunca se sacie por completo”.

Haciendo el amor,
una otra vez,
desde la luz del alba,
“hasta el nuevo amanecer”.

El amor profundo y sincero,
no entiende de edades,
es un deseo constante,
“aunque nuestro cuerpo no sea el de antes”.

“el deseo es la expresión expresiva del amor”.

Miguel de la Mancha
(poeta y escritor)