«Llegado el momento»

Después de un esfuerzo,
llega la satisfacción,
de saborear los logros,
“el fruto del sacrificio”.

Después de una decepción,
es el momento ,
de analizar los puntos,
“dónde se nos truncó la suerte”.

Llegado el momento,
miramos hacia detrás,
vemos los pasos,
“que caminamos para progresar”.

Llegado el momento,
vemos que la vida,
evoluciona tan rápidamente,
“todos son cambios constantes”.

Cuando iniciamos un trabajo,
estamos siempre luchando ,
para escalar posiciones,
“siempre que seamos honestos”.

Llegado el momento,
nos debemos de llenar de valentía,
para afrontar la vida,
”viviendo el día a día”.

Llegado el momento,
debemos de saber escoger,
entre los que se llaman “amigos”,
“y los amigos de verdad sin condiciones”.

Aunque nos sentamos afligidos,
nos queda siempre,
la esperanza de sentir,
“llegado el momento esperado”.

Siempre nos quedará ,
el amor incondicional,
de nuestro padre Dios,
“siempre estará con nosotros”.

Llegado el momento,
sabremos como nos trata la vida,
mirando nuestras canas,
“marcando experiencias en nuestra vida “.

Llegado el momento,
dejemos atrás la timidez,
para poder llegar,
“enamorar un corazón”.

Llegado el momento ,
estaremos ya preparados,
para ayudar al mundo,
“siempre que nos dejen de ayudarles”.

Llegado el momento ,
debemos de dar consejo,
a las personas con necesidad,
“de sentir la medicina espiritual”.

Si todas las personas,
tuviesen el corazón sano,
estarían siempre dispuestos,
”para vivir todos como buenos hermanos”.

Si en toda la vida ,
estuviésemos ya preparados,
para disfrutar de la naturaleza,
“llegado el momento indicado”.

Por eso estemos todos unidos,
para ser una misma persona,
un mismo pensamiento ,
“pero siempre llegado el momento”.

Miguel de la Mancha

( poeta y escritor)

«Perdòn o rencor»

En la vida debemos,
de saber vivir bien,
aunque el pasado te marque,
“siempre con la frente muy alta”.

Aunque no disfrutemos,
de la felicidad completa,
pero debemos de pensar,
“que tendremos nuevas oportunidades”.

No debemos de tener rencor,
por mucho daño recibido,
es como la lluvia,
“cuando cae limpia todo”.

Dios nos dejó dicho,
si te pegan en una mejilla,
debemos de poner la otra mejilla,
“pero perdonando siempre”.

Si sentimos rencor,
debemos de disimular,
la ira le hace al hombre,
“más frágil y predecible”.

En un corazón ,
no debe de haber sitio ,
para el rencor,
“siendo difícil olvidar el dolor”.

No nos damos cuenta,
que cuando vivimos con rencor,
se nos pasa la vida,
“y no vivimos con la paz del perdón”.

Para poder vivir en paz,
debemos de cambiar,
volver a ser personas,
“dar perdón y olvidar el rencor”.

A veces sucede,
que el daño más grave,
viene de la familia,
”y nunca podremos olvidar”.

Suelen ser los responsables,
que en los momentos de debilidad,
empuñaron el cuchillo,
“para hacer sangre del árbol caído”.

Una persona siempre se suele refugiar,
en el cariño familiar,
se debe de encontrar consuelo,
“pero se vive en el infierno”.

Entonces comienza el dilema,
dónde queda la sangre,
pero solo quedan las heridas,
“le guardamos rencor o las perdonamos”.

Cuando es un amistad,
duele y no duele,
pero ahí está el dilema
“le damos perdón o rencor”.

Cuando es una pareja,
que sólo te utiliza,
tú le entregas amor,
“pero somos un juguete para ellos”.

Entonces comienzan los desengaños,
vivimos de desilusión en desilusión,
y se nos muere el amor,
“que merece perdón o rencor”.

Por eso debemos de ser,
como buenos cristianos,
se lo dejamos a “Dios”,
“y nos regala su perdón”.

Por eso en esta vida,
debemos de vivirla,
tratar de ser felices,
“aunque sean momentos difíciles”.

La vida son cuatro días,
si perdemos “ dos” en rencor,
no vivimos para “malvivir”,
“perdonémos y vivamos en paz”.

Miguel de la Mancha
(poeta y escritor)

» Buscando la libertad»

No todo se puede encontrar,
estando en tierra firme,
puede ser que l libertad,
“la encontremos en el mar”.

Una buena experiencia,
una nueva oportunidad de vida,
escapar de las rutinas,
”olvidar amores y desamores”.

Cuando sientes que todo,
se derrumba sin remedio,
sientes una pasión ,
”vivir en la libertad del mar”.

No todas las personas,
se aventuran por despecho,
ni tampoco por desamor,
“un deber de la vida”.

En condiciones normales,
el mar nos sirve,
para tomar unas merecidas,
“y deseadas vacaciones”.

Para poder recuperar fuerzas,
paseamos por la playa,
mirando las olas,
“como vienen y van”.

Pensamos que los problemas,
nos imaginamos que se van ,
como se va nuestro cansancio y estrés,
”hacia dentro en el mar”.

Como dijo Jose Luis Perales,
y se marchó al mar,
montado en su barco,
”un barco llamado libertad”.

Hay personas que se marchan ,
a pasar la bohemia,
entre cielo y mar,
“dónde nadie pueda molestar”.

A la luz de la luna,
bajo el susurro de las olas,
a la luz de la luna,
“reflejada y única farola en el mar”.

Dicen los viejos marineros,
que cuando se está coqueteando,
con las bellas sirenas,
“te suelen cautivar con su melena”.

Allá en la soledad,
uno se sumerge en sus recuerdos,
buscando la claridad,
“que haga de pensar bien”.

Pero cuando es por necesidad,
lo tomas por oficio,
el ser marinero,
“es ser un oficio sufrido pero bendecido”.

Pero si el marinero,
es un vigilante del mar,
aunque busques la tranquilidad,
“debes velar por la seguridad”.

Como dice el dicho,
el marinero tiene amores,
una mujer en cada puerto,
”pero sólo una es la dueña de su corazón”.

Aunque viva en la libertar,
su mente y sentimiento,
están con sus seres queridos,
“pensamiento , corazón y alma”.

Aunque las noches sean,
en plena calma,
la tristeza está en su corazón,
“porque está lejos de gran amor”.

Los días terminan siendo,
una gran monotonía,
pero la calma de la soledad,
“es el tesoro para encontrar”.

Así esta vida,
unos buscamos el mar,
para encontrar la tranquilidad,
”pero otros por la necesidad”.

La mejor huida,
escabullirse de la realidad,
para encontrar un equilibrio,
“afrontar la vida con seguridad”.

Miguel de la Mancha

( poeta y escritor)

«Te regalo el cielo»

Tu sabes mi amor,
que tú eres mi vida,
por eso te regalo estos versos,
“que salen de mi corazón”.

Hoy te traigo esta rosa,
pero cuando la deseo comparar,
puedo comprobar con certeza,
“que eres más hermosa que la rosa”.

Con tu belleza y hermosura,
me llevas a la locura,
desde el día a la noche,
“deseando de abrazarte con ternura”.

Sentirte pegada a mí ,
es la mejor sensación,
ahora de verdad siento,
”como te amo por dentro”.

Tú sabes mi amor,
que en la vida no son regalos,
si no sientes el calor,
“de un amor sincero”.

Me encantaría de corazón,
bajarte la luna,
pero como soy pobre,
“me conformo que seas mi cielo”.

Intento con mi amor,
hacerte de sentir,
la reina de las estrellas,
“que seas centro del universo”.

Cuando te veo triste,
desearía convertime en ángel,
para abrazarte con mis alas ,
“y convertirte en mi angelito”.

Cuando estas con desconsuelo,
me gustaría subirte a la luna,
para que nadie te vea,
“la tristeza de tus ojos”.

Deseo en todo momento,
ser la medicina,
que alimenta tu alma,
”para regalarte felicidad en la vida”.

Te regalo mi corazón ,
por si algún día,
te falta la vida,
”ahí tienes la mía”.

Te regalo mi amor sincero,
porque nos conocimos tomando licor,
y deseo que nunca,
“necesite licor para consolarme”.

Te regalo mis labios,
ningunos otros besos,
jamás hagan olvidar,
“mis besos apasionados”.

Te regalaría por siempre,
la pasión que tenemos,
aunque seamos viejitos,
“que siempre nos deseemos como ahora”

Miguel de la Mancha
(poeta y escritor)

«Suspiro por tì»

“Suspiro por ti”

Por un beso tuyo,
yo suspiro todo entero,
desde la cabeza,
“hasta los pies”.

Porque tu vengas conmigo,
me derrito completo,
sentir la dicha,
“de tenerte a mi lado”.

Por sentirnos unidos,
daría mi vida,
entregarnos al amor,
“con la bendición de Dios”.

Entregarte todo para ti,
mi alma y mi corazón,
ven pronto mi vida,
“a mi lado está tu sitio”.

Si me guiñas un ojo,
tiemblo como un adolescente,
sólo tenerte de frente,
“deseo sólo besarte”.

Si me lanzas un beso,
con tanto cariño,
lo guarda mi corazón,
“ardiendo de pasión”.

Alimentando este sentimiento ,
que me hace,
feliz por dentro,
“profundo en mis adentros”.

Dentro de mi ser,
alojado en mi corazón,
está el tuyo,
“compartiendo mi amor”.

Toma mi corazón,
tuyo es ya mío no,
juntamos los dos,
“en una bella historia de amor”.

Hagamos de este momento,
una eterna realidad
encendamos una llama de pasión,
“que nos funda en uno a los dos”.

Sellemos nuestro amor,
juntado nuestros labios,
sellemos con un beso ,
“nuestro apasionado amor”.

Gracias por llegar a mi vida,
por estar a mi lado ,
seria un sueño,
“cumplir esta bonita realidad”.

Un beso apasionado,
un abrazo prolongado ,
ese es el trato de amor,
“que hemos alcanzado juntos”.

Si esta es la vida,
que tendremos juntos,
preparémonos para disfrutar,
“de las mieles del amor”.

Una mujer maravillosa,
que fue nuestra madre,
nos dió la maravillosa vida,
“para que unamos nuestras vidas”.

Pero con la bendición,
de nuestro gran padre,
él es nuestro padre Dios,
“que nos regaló su bendición”.

Miguel de la Mancha
( poeta y escritor)

» Serà esto bueno»

Esto será bueno,
o será pecado,
decirte a ti hoy,
“como estoy de enamorado”.

Son sentimientos encontrados,
pero si no te veo,
y si no te siento,
“ muero en mis adentros”.

Ahora estoy feliz y contento,
que bello es esto,
que maravillosa sensación,
“poder amarte mi amor”.

Puede ser pecado,
pero de ti ,
yo estoy enamorado,
“poder hacerte feliz a mi lado”.

Si al despertar,
no te tengo a mi lado,
me duelen mis besos,
“que no te son entregados”.

Y sin el “buenos días”,
por ti tan deseado,
acariciando tu pelo,
“es mi mayor anhelo”.

Besar tus labios,
siempre es una bendición,
o quizás un pecado,
“ Dios bendiga nuestro amor”.

El amor tan maravilloso,
que nos tiene tan apasionado,
en mi sueños te tengo,
“y despierto y te beso”.

En sueños te abrazo,
te pego a mi pecho,
aquí en nuestro lecho,
“bajo el mismo techo”.

Nos queremos nos amamos,
nos sentimos apasionados,
gozamos del amor,
“como dos locos apasionados”.

Nos queda el deseo,
de deseamos tanto,
besarnos y desearnos,
“amarnos por la eternidad”.

Será que esto es pecado,
si es así la situación,
bendito sea este infierno,
“fundiéndonos en un fuego”.

Pero siempre a tu lado,
tardaste en llegar,
ahora no te vas a marchar,
“ volemos juntos amor mío”.

Por el paraíso de la ilusión,
que nos llena de tanto amor,
disfrutemos el fuego,
“del amor y la pasión”.

Fundámonos en uno,
en uno solo los dos,
será esto un pecado,
“que estemos enamorados”.

O quizás sea la razón,
un maravilloso amor,
que nos envuelve a los dos,
“que bonito es el amor”.

Como dice el dicho,
lo prohibido siempre,
es la más deseado,
”siempre deseamos saborear lo prohibido”.

Sea tentación o pecado,
pero vivir este maravilloso amor,
es lo más hermoso y sabroso,
“que disfrutamos los dos enamorados”.

Miguel de la Mancha

(poeta y escritor)

«Espìritu perdido»

El espíritu es ,
según se dice ,
un alma pasajera ,
“perdida en la vida”.

Pero cual vida,
reflexionemos y analicemos,
un espíritu necesita,
“un alma que lo acoja”.

Que lo tenga y soporte,
pero no hay alma ,
sin un espíritu ,
“sería un alma vacía”.

Son como la fusión,
del agua y el aire,
la noche y el día,
“como la luna y las estrellas”.

El alma necesita un espíritu ,
no hay espíritu sin vida,
la vida necesita un cuerpo ,
“y el cuerpo necesita un espíritu “.

Para sentirse con vida,
la vida necesita su espíritu,
ese es el espíritu ,
“necesario para sentirse con vida”.

Que mueve el sentido ,
de nuestra vida,
derecha o torcida,
“pero siempre necesitamos sensaciones”.

Las sensaciones son,
sentimientos para seguir ,
y seguir viviendo en la vida,
“siempre con buenos sentimientos”.

La vida se necesita ,
un cuerpo para transmitir ,
el frío o calor,
“la alegría y el dolor”.

Así son las cosas,
calor cuando tenemos éxito,
frío cuando nos hieren,

Cuando nos abandonan al olvido,
todo lo vivido se olvida,
nos rompen el corazón ,
“nos desean destrozar la vida”.

Pero depende como seamos,
o qué clase de vida llevemos,
ahí está la cuestión ,
“para valorar el dolor causado”.

Por eso empieza la ilógica ,
no hay espíritu,
que no esté acompañado,
“siempre de su fiel compañera”.

El alma pasajera ,
por eso decimos,
no hay un alma perdida,
“que no esté sola”.

No es por estar sólo,
no es no tener espíritu,
suele ser que no ha llegado ,
“el espíritu deseado”.

O quizá para nosotros,
el espíritu que tenemos asignado,
así es el amor,
“así es el destino de cada uno”.

Uno no está solo,
sólo que no ha llegado,
el amor designado ,
“por nuestro padre Dios amado”.

Por eso siempre ,
un alma recibida,
será bien recibida ,
“con una calurosa bienvenida”.

Uno sabe que siempre,
le llegará a su vida,
su alma gemela,
“dejando de ser espíritus errantes”.

Y así dejaremos de ser,
un espíritu perdido,
entonces disfrutemos de la vida,
“para sentirnos locos y enamorados”.

Miguel de la Mancha
(poeta y escritor)

«La canciòn»

Como una linda canción,
así somos en realidad,
caminando en soledad,
“vagando de un lado y otro lado”.

Viendo pasar el tiempo,
la vida se consume en un momento,
un día y otro día,
“día tras día”.

Caminando y mirando,
como las aves van volando,
de aquí para allá,
“sin importarles nada”.

Y nosotros imaginando,
que la vida es fácil,
así los días nos van pasando,
“el tiempo vamos consumiendo”.

Y de pronto un día,
cuando más triste parecía,
de la nada tu llegaste,
“y mi vida cambiaste”.

Me iluminaste con una mirada,
me sonrojaste sorprendentemente,
con bella una sonrisa,
“dulce sonrisa de angelito radiante”.

Ahora el tiempo iba deprisa,
mi corazón palpitó,
el tuyo me lo robó,
“eres la dueña de mi corazón”.

Esa linda sonrisa,
me cautivó por completo,
por esos lindos labios,
“ahora el tiempo va más deprisa”.

Mi timidez aparecía,
para decirte hola,
yo no me atrevía,
“por ti yo me moría”.

Sólo con mirarte,
mis palabras se escondían,
gracias por concederme,
“la dicha de conocerte”.

Dentro de mí ,
algo bello nacía,
como un volcán,
“mi corazón no deja de palpitar”.

Mis preguntas surgían,
desde lo más profundo,
desear que te convirtieses,
“en mi reina adorada”.

Y te volvieses,
todo en mi vida,
seas mi compañía,
“para el resto de la vida”.

Un día y otro día,
hasta el final,
de nuestros días,
“si Dios no lo concede en la vida”.

Bendito fué aquel día,
fuiste mi mayor alegría,
ya me imagina adorándote,
“ Dios mío que dicha sería”.

Tus ojos brillan,
de dicha y alegría,
por fin llegó ese día,
“que alegró mi corazón”.

Gracias Dios mío,
porque a mi lado te envía,
así empezó mi alegría,
“fuera la monotonía”.

Eres el motivo,
de alegrarme mis días,
lo demás son tonterías,
“atrás quedó la tristeza que tenía”.

El mejor momento llegaría,
cuando tus labios besaría,
bendito sea mi destino,
“me colmaste hasta el infinito”.

Ahora mi corazón,
palpita con fuerza,
de amor y alegría,
“ahora si creó en el destino”.

Espero no defraudarte,
en la pasión,
así poder amarte,
“porque el destino nos unió”.

Dios padre nos ha bendecido,
ahora estamos unidos,
en un maravilloso amor,
“te amo mi amor”.

Miguel de la Mancha
(poeta y escritor)

«Poesia eres tù»

Poesía eres tú,
sentirte a mi lado,
saber que eres mía,
“y yo soy todo tuyo”.

Poesía es sentirte,
es poder abrazarte,
fundirse en un abrazo,
“sentir tu calor apasionado”.

Poesía son tus ojos,
negros y brillantes,
llenos de felicidad,
“al verme llegar a tu lado”.

Poesía son tus labios,
lindos y húmedos,
poder besarlos,
“es saborear la gloria de tus besos”.

Poesía es embriagarme,
con tus besos de miel,
ver las estrellas,
“sintiendo el deseo de comérselos”.

Poesía es poder complacerte,
llenarte con mis besos,
atraerte con mi pasión,
“fundirnos en el mismo fuego”.

Poesía es besar tu cuerpo,
rincón a rincón,
pasarle mis labios,
“por toda tu piel”.

Poesía es sentirte,
buscando mi cariño,
sintiendo mi calor,
“ los dos calentándonos con amor”.

Poesía es desnudarte el alma,
llegar a lo más profundo,
de tu corazón enamorado,
“con mi amor apasionado”.

Poesía es desnudar tu cuerpo,
sintiendo tu deseo,
de poder hacerte mía
“todos los días de mi vida”.

Poesía es hacer el amor,
llenos de pasión,
beso a beso,
“disfrutándolo los dos”.

Poesía es sentir el placer,
de estar unidos,
disfrutando del amor,
“teniendo sentimientos tan profundos”.

Poesía es hacer el amor,
fundidos los dos,
en un solo cuerpo,
“explotando de pasión”.

Poesía es hacerte disfrutar,
como me haces tú a mí,
poder llegar juntos,
“al éxtasis de la pasión”.

Poesía es después de hacer el amor,
besarnos nuestro cuerpo,
saboreando nuestro momento,
“aumentando nuestro sentimiento espiritual”.

Poesía es sentir como te siento,
amarte como te amo,
poder hacerte feliz,
“y muy dichosa a la vez”.
Esto es la poesía,
sentirlo con el corazón,
vivirlo con la pasión,
“con la bendición de Dios”.

Poesía es hacerte sentir,
la belleza del amor,
llenándote de cariño y ternura,
”tratándote como mi más bella flor”.

Poesía es la forma sutil,
de desnudar tu alma,
sin tocar tu cuerpo,
“amándote en cada momento”.

Poesía es vivir,
sintiendo la magia,
expresando nuestros deseos,
“de amarnos y ser felices sin fin”.

“No se disfruta haciendo el amor si no lo sientes con el corazón”.

Miguel de la Mancha
(poeta y escritor)

«Presente»

El ser humano,
por su condición ,
nunca está conforme,
“es base de nuestra naturaleza”.

Si tengo esto,
deseo aquello también ,
pero nunca valora,
“lo que poseemos en realidad”.

Lo mismo ocurre,
con las personas,
sin valorar realmente a quién ,
“el valor a quién tiene a su lado”.

Envidiamos a las personas,
por lo que poseen,
pero cuando poseemos nosotros,
“no valoramos nuestro tesoro”.

Cuando tenemos nuestro trofeo,
cuando está al lado nuestro,
nos sentimos realizados,
“nos sentimos dueños sin derecho”.

No le ofrecemos después,
ni los detalles anteriores,
menos el tiempo ,
“necesario que necesita como antes”.

A veces somos ,
o más bien creemos,
que es perpetuo,
“debiendo de ser un deseo mutuo”.

A nuestro lado ,
pero cuando lo vemos,
perdido o se ha marchado ya,
“lamentamos no haber dado más”.

Empezamos a dar,
pataletas de ahogado,
queremos a toda costa,
“recuperar lo que ya perdimos”.

Aunque luchemos contracorriente,
pagamos un alto precio,
el haber hecho daño,
“con tanta falta de aprecio”.

Luego nos duele en el alma,
y después nos arrepentimos,
de todos esos detalles,
“que no hicimos en su momento”.

Pasamos de un idilio,
a un sufrimiento,
haciendo de caer,
“apagando esa llama de pasión “.

Vamos apagando sin querer,
el momento de felicidad,
cambiándolo por rutina,
“y así matando el amor”.

Ese maravilloso amor,
que tanto nos costó ,
cultivar con sacrificio,
“hacer nacer de la nada”.

Pero pronto lo matamos,
porque la costumbre,
se convierte en rutina,
“y el final se vecina”.

Cuando pasa esto,
la rutina es el abandono,
y el abandono se convierte,
“es la muerte del amor”.

La perdida de un sentimiento,
que no lo valoramos,
hasta haberlo perdido,
“es el peor remordimiento”.

Por eso debemos,
“al nacer el amor”,
vivir el presente,
“y hacerlo todo inolvidable”.

Vivir el día a día,
como si fuese,
el día de la conquista,
“y sembrar el futuro juntos”.

En vez de lamentarnos,
de lo que hemos perdido,
felicitarse a si mismo,
“por tener viva la llama del amor”.

Con esa actitud,
de haber logrado,
vivir una vida,
“disfrutando un presente maravilloso”.

Soñar con la ilusión,
para vivir un futuro,
y no lamentarnos nunca,
“de perder un gran amor”.

No debemos de lamentar,
que hubiese sido ,
un presente distinto,
“ahora no sería un pasado”.

Si yo hubiese hecho,
valorando todos los momentos,
lo que hoy lamento,
“hay que ser presente y no pasado”.

Miguel de la Mancha

( poeta y escritor)