Miguel De la mancha

Empezó una mañana ,
al salir de la iglesia,
tú dudabas de mí,
“yo me enamoré de ti”.

Compartiendo alegría,
uno y todos los días,
empezando por buenos días,
“hasta dulces sueños vida mía”.

Una tristeza vista,
una alegría vivida ,
una linda sonrisa,
“alegrando una la lágrima caída” .

De noche y de día,
con llanto de nuestros niños ,
de este modo así los criamos,
“con respeto y humildad los educamos”.

Año tras año,
se fueron marchando ,
creando sus familias,
“cómo nosotros la creamos”.

Eres toda mi felicidad,
artífice de mi alegría,
yo siempre deseo mi amor,
“colmarte de satisfacción y felicidad”.

Así fuimos viviendo,
nuestra vida de amor,
con mucho cariño,
“la vida fuimos compartiendo”.

Hasta que llegó ese día,
trágico para los dos,
maldita y cruel enfermedad,
“nuestras vidas felices alejaría” .

Ya no sabía qué hacer,
lo intento otra vez ,
esa bendita medicina,
“el cáncer no pudo vencer”.

Aquí ahora yo recuerdo,
cuando un año ya pasó,
éramos los dos,
“solito estoy ahora yo”.

Miro por la ventana,
a la luna le pregunto,
ahora sin ti mi amor,
“dime que hago yo sólo”.

Un mes con “el mayor”,
el “mediano” va detrás,
yo no quiero estorbar,
“la vida así me ha de tratar”.

Las hijas dicen,
que son para los padres,
pero a su marido,
“le estorba el viejo padre”.

Mis ojos se humedecen ,
inundados por la pena,
le pregunto al viento,
“cómo él se lleva lo que siento”.

Ahora me siento,
como la mascota,
que me tienen que cuidar,
“pero no deja de estorbar”.

Ahora vivo esta soledad ,
que la vida me castigó,
pregunto a las estrellas,
“sí me dicen algo de ella”.

Me sonríen las estrellas ,
más bellas cuál de ellas,
sé que allí estás tú,
“iluminándome como una de ellas”.

Por ti yo tengo,
esta tristeza contínua ,
pienso solo en tí,
“por qué te tuviste que morir”.

Así es el destino
compartimos esta vida,
sufrimos las penas,
“y gozamos las alegrías”.

No me hagas de sufrir,
de esta vida ya me quiero ir,
deseo estar allí ,
“de nuevo junto a ti”.

“50 años” vivímos,
muy felices junto a ti,
pero ya no son nada,
“si no estás haciéndome feliz”.

La vida sólo se vive una vez,
una vida en pareja,
es una vida de sacrificio,
“aunque sea un maravilloso beneficio”.

Miguel de la Mancha
(poeta y escritor)

Hazme un tatuaje,
que nunca se borre,
que día a día
ilumine mi corazón,
“alentando mi amor”.

Hazme un tatuaje,
que siempre me recuerde,
que ella está en mi vida,
que ella es mi amor,
“lo es todo en mi vida”.

Hazme un tatuaje,
que llene mi vida,
y diga que eres mía,
uno y todos los días,
“así nunca te olvide jamás”.

Hazme un tatuaje,
con sangre y coraje,
que lleve su rostro,
como un lindo paisaje,
“nos vayamos de viaje”.

Hazme un tatuaje,
sin herir mi corazón,
que me vuelva loco,
sólo por ti,
“para mi gran amor”.

Hazme un tatuaje,
a herida abierta,
que todo el mundo,
vea como cicatriza,
“con medicina de tu belleza”.

Hazme un tatuaje,
donde estemos los dos,
unidos por la vida,
con un mismo corazón,
“repleto de infinito amor”.

Hazme un tatuaje,
grabado a fuego,
que tú estés dentro,
viviendo muy feliz,
“dentro un paraíso feliz”.

Hazme un tatuaje,
que dure toda la vida,
que diga eternamente,
unidos los dos,
“unidos para la eternidad”.

Hazme un tatuaje ,
que sea tan bello,
como la belleza de mi amor,
que cada vez que yo suspiro,
“con tu aire que yo respiro”.

Hazme un tatuaje,
que sirva de bandera,
que nadie pueda robar,
este corazón enamorado,
“que ella tiene el suyo marcado”.

Hazme un tatuaje,
que ningunos labios,
puedan colonizar este sentimiento,
que por ella siento,
“en lo más profundo de mis adentros”.

Hazte un tatuaje,
que sea en la vida,
una forma maravillosa,
de sentir las cosas,
“como eres tú mi bella rosa”.

Hazme un tatuaje,
que me sirva de equipaje,
que se imborrable,
en este viaje a la felicidad,
“donde nada ni nadie nos separe jamás”.

Miguel de la Mancha
(poeta y escritor)

El poder de la palabra,
depende del modo,
o el momento que se dice,
que te puede “llenar o herir”,
“o simplemente dudar o afirmar”.

No es lo mismo,
el decir “lo quiero”,
a afirmar que “le quiero”,
o quizás decir “lo siento”,
“para afirmar que te siento”.

Decir que “al verte”,
o la sorpresa de “verte así”,
decir que “te extraño”,
cuando no estás a “mi lado”
“decir que me siento extraño”.

Una simple palabra ,
según se acompañe,
tiene su significado,
es asombroso su poder,
“sentir lo que podemos hacer”.

Podemos estar” enojados”,
o estar “alejados”,
pero si existe un “sentimiento”,
sólo con decir “te extraño”,
“para decir te extraño a mi lado”.

Se nos enciende esa “ lamparita”,
que se agita “nuestro corazón”,
y nos falta “la respiración”,
es tan grande “la desesperación”,
“y se convierte en eterna la espera”.

El amado necesita,
“amar” a su amada,
la amada necesita,
“sentir” a su amado,
“para siempre estar a su lado”.

Poder “saborear” sus labios,
para “olvidar” la discusión,
“saborear” la miel del amor,
“compartir” desde una sonrisa,
“hasta el poder de la conciliación”.

Para hacer feliz a su enamorada,
con una simple mirada,
que la reconforte de nuevo,
que este llena de complicidad,
“rebosante de amor y sinceridad”.

¿Por qué perder ese tiempo?,
estar enojados los dos,
si se puede disfrutar del amor,
felicidad y vivan la vida,
“y disfruten del amor con pasión”.

Fuera los “rencores”,
“arriba” las pasiones,
que sean lo más “bello”,
que salga de nuestros,
“corazones llenos de amor”.

Grandes son los sentimientos,
que tenemos guardados,
grabados en el interior,
y debemos de liberarlos,
“homenajeando al amor sin dudarlo”.

Sin distinciones de ”tiempo” ,
no “existe el pasado” ,
pero se “vive el presente”,
y se ansia “el futuro”,
“y así se olvida lo errado”.

Pero una palabra “mal dicha”,
o quizás “mal interpretada”,
terminan “haciendo desaparecer”,
las esperanzas de” futuro”,
“enterrando las promesas deseadas” .

Puede ser un “gran amor”,
pero marcado por una “sola palabra”,
cambiando un “gran presente”,
que pudo ser un “gran futuro”,
“y se convierten en un triste pasado”.

Por eso decir “ te amo”,
no debe de ser,
una simple expresión,
que sea un sentimiento,
“que siempre salga del corazón”.

Ese” bello sentimiento”,
no debe de “ marcar el tiempo”,
porque el “tiempo del amor”,
pero que “sea realmente” ,
“un puro y verdadero amor”.

Por eso si digo “te amo”,
no lo dudes nunca,
son las palabras sinceras,
que salen de mi corazón,
“con el poder de mi amor”.

Miguel de la Mancha
( poeta y escritor)

Mi tierra manchega,
aquí desde la distancia,
mi voz no se escucha,
“pero el sentimiento si llega”.

Aquí desde mi corazón,
mis versos salen,
por eso los puedo escribir ,
“para deleitar con mi sentir”´.

Así es mi tierra manchega,
marcada en el corazón,
es tierra de hidalgos,
“como la demostró Don Quijote”.

Es una tierra noble,
tierra sufrida ,
árida y bien labrada,
“así es mi tierra la mancha añorada”.

Castillos vigilantes,
en la cima de los montes,
marcando los territorios ,
“de los nobles terratenientes”.

Pero siempre bien adornados,
de grandes y ricos viñedos,
que convierten la uva,
“en un maravilloso vino a degustar”.

La sangre de la tierra,
convertida en vino ,
nos demuestran que nuestra tierra,
“nos regala un manjar divino”.

Está el vino de Valdepeñas,
o vino de Almansa,
también el Toledano,
“deleitan el paladar más exquisito”.

Entre largos mosaicos,
entre chaparros y pedrizales,
lucen alineados como velas,
“son grandes y bellos olivares “.

Acompañado las comidas y ensaladas,
de los más exigentes,
tenemos el mejor aceite,
“ en las aceitunas siempre presente”.

No existe mejor ingrediente,
que los virginales aceites de oliva,
aderezando con su sabor,
“los mejores manjares más exijentes”.

Allá donde corta el viento ,
se deleitan mis ojos,
santo y seña de la mancha,
“se levantan los molinos de viento”.

Molinos de viento,
como guardianes del horizonte,
según el hidalgo Don Quijote,
“enemigos y feroces gigantes”.

Gigantes en movimiento,
en tierra de la Mancha,
tierra de hidalgos,
“infatigables caballeros andantes siempre combatiendo”.

Acompañados de damas dulces y consoladoras,
que te roban el corazón,
del caballero andante,
“como el corazón del visitante”.

Un placer irresistible,
nuestros exquisitos quesos,
probando el suave queso,
“queso de cabra irresistible probarle”.

Criadas en la montañas,
entre chaparros y jarales,
dan ese sabor único,
“para los más exquisitos paladares”.

Si lo deseas descubrir,
y disfrutar como Dioses,
solo en La Mancha,
“encuentras esos exquisitos sabores”.

Uno de los más ricos manjares,
son las gachas de pitos,
hecha con harina de almorta,
“sólo en la Mancha sabe tan exquisito”.

Acompañada de buen vino,
para recibir al bienvenido,
no te pierdas en tu camino,
“y con cariño se recibe al peregrino”.

Si vas a la Mancha,
eres bienvenido al lugar,
no te alborotes,
“porque estás en la tierra de don Quijote”.

Si deseas tu hambre saciar,
en la Mancha lo vas a encontrar,
suculentas y deliciosas comidas,
“pueden con el hambre más voraz”.

En la Mancha tenemos,
los tres placeres,
queso vino y mujeres,
“siempre te pueden sorprender”.

En Los Cortijos nací yo,
entre los montes de Toledo,
y mi tierra manchega,
“siempre en el corazón se lleva”.

Allí puedes disfrutar,
probando el alma de la montaña,
el agua de la fuente Motril,
“te hará siempre de vivir feliz”

La Mancha no es una leyenda,
es el corazón de España,
el Quijote la recorrió,
”y en ella nací yo”.

Miguel de la Mancha
(poeta y escritor)

“ El deseo puede ser” ,
según el pensamiento ,
tiempo y momento ,
“felicidad o sufrimiento”.

“Tendrás muchas sensaciones “,
pero siempre estarán,
alegrando los corazones ,
“para colmarlo de bendiciones “.

“Te deseo un gran día”,
es una expresión de bendición ,
se desea que todo sea lo mejor,
“y que sea un día lleno de éxitos”.

“El deseo de tomar”,
un buen desayuno,
es deseo corporal,
“para el hambre saciar”.

“El deseo de ser feliz”,
es para todos,
una bendición de cariño,
“con la felicidad de un niño”.

“Yo desearía siempre,
para que todos seamos cordiales,
y podamos ser felices,
“conscientes de una vida cordial”.

“ Desearía una vida cordial”,
llena de retos y desafíos ,
para vivirla intensamente,
“el desafío sin final”.

“El deseo de una compañía”,
es un deseo sincero,
de vivir con respeto,
“compartiendo esa maravillosa compañía”.

“El deseo de un beso tuyo”,
es un deseo de tu amor,
el amor que por ti yo siento ,
“en todos los momentos” .

“El deseo de crear una familia”,
es el deseo de progresar,
y poder enseñar y inculcar,
“lo valores que nos inculcó nuestra familia”.

“El deseo de todos padres,
que la familia esté bien ,
todo le salga genial,
“vivir unidos y llenos de felicidad”.

“El deseo de un padre”,
es poder sentirse orgulloso,
de ver a sus hijos con el beneficio,
“de lo lucharon y estudiaron con sacrificio”.

“El deseo de un hijo”,
es ver a sus padres,
viviendo una vida cordial,
“llenos de dicha y felicidad”.

“El deseo de todos”,
es ver a nuestros mayores,
que nunca olvidaremos,
“lo que por nosotros hicieron”.

“El deseo de toda persona”,
es que en este mundo,
vivamos con respeto,
”cordialmente y seamos todos iguales”.

“Una persona con corazón”,
desearía poder contribuir,
con las acciones y detalles,
“crear felicidad en casa y en la calle”.

“Hay de desear siempre”,
que el sol brille por igual,
que nos ilumine la luz,
“y que nunca nos atrape la oscuridad”.

“El deseo de un cantante”,
es poder alegrarte la vida,
con unas notas musicales,
“y con canciones para apasionarte”.

“El deseo del poeta”,
con una simple poesía,
pudiendo llegar son pasión,
“con sentimiento a tu corazón”.

“Y yo deseo que los sueños´,
se cumplan para todos,
los que están leyendo esto,
“os deseo un maravilloso día con mucho cariño”.

Miguel de la Mancha
(poeta y escritor)

Como una lágrima,
caída en la arena,
así va mi corazón,
tan falto de amor,
si no sé de ti,
que será de mi,
inútil en la vida,
separados tú y yo,
tú piensas en mí,
“en tí pienso yo”.

Que bonito sería,
renacer este amor,
las ilusiones entre los dos,
poder fundirnos en el fuego,
al unir nuestros cuerpos,
en uno sólo los dos,
amarnos como posesos,
disfrutando del sexo,
será pasión o será amor,
“este fuego que sentimos los dos”.

Pero lo único cierto,
es la tristeza del momento,
de que sirven recuerdos,
si ya se murieron,
todos los sentimientos,
hagamos el honor,
para recordar por siempre,
podemos recordar lo bonito,
o sufrir la condena,
“de extrañarnos eternamente”.

Iremos navegando en esta pena,
dónde nos lleve,
aunque solo sea,
ir a contracorriente,
nunca es suficiente,
si no se puede disfrutar,
del placer de amar,
una y mil veces,
en honor a la pasión,
“ el corazón no se lo merece”.

Como un espejismo parece,
pero el recuerdo siempre prevalece,
viene el amor,
y pronto desaparece,
ningún corazón lo merece,
se puede morir de amor,
pero de amor no sé muere,
pero el dolor escuece,
aunque no sea el aliciente,
“pero con en ello sufre la gente”.

Como una lágrima que desaparece,
y en la arena se pierde,
así es en la vida,
se ama con el corazón,
y se sufre por amor,
que injusta en la vida,
tan cruel y retorcida,
a veces tan feliz,
otras tan infeliz,
“con cabeza alta hemos de seguir”.

Ya sea que esta vida,
venga dulce o amarga,
debemos de seguir,
con amor o sin amor,
aunque nos toque sufrir,
en ella tenemos que seguir,
la vida continua,
o debemos de continuar,
con fuerza y voluntad,
“ las ganas para poder seguir”.

Dice que la vida pasa,
pero somos nosotros,
los que pasamos por ella,
igual que las lágrimas,
pueden ser de emoción,
de tristeza por dolor,
o quizás por decepción,
pero el momento es único,
como las lágrimas en la arena,
“se secan y nos dejan una vida más bella”.

Miguel de la Mancha
(poeta y escritor)

A veces es tan complicado,
vivir un amor,
un amor tan intenso,
“pero con el ser equivocado”.

Es dura la situación,
sin poder dar,
rienda suelta al amor,
“es una dura decepción”.

Pienso y pienso,
como hemos llegado,
a esta situación,
“para estar así enredados”.

Si yo tenía mi vida,
lo mismo que tú ,
tú me amas,
“yo te amo”.

Pero el destino,
nos puso juntos ,
casualidad del amor,
“o capricho del destino”.

A solas en silencio,
pienso en tí,
lo mismo que tú en mí,
“las cosas son así”.

Cuando beso a mi mujer,
imaginando que eres tú,
saboreando los labios,
“como si fuesen los tuyos”.

Esos labios de miel,
que me hacen enloquecer,
que no puedo dejar de besar,
“una y otra vez”.

El deseo de tus labios,
que suspiran por los míos,
eres un deseo imposible,
“aunque deseamos que sea posible”.

Tú ya tienes dueño ,
lo mismo que yo dueña,
pero el amor es libre ,
“y el corazón no engaña”.

Aunque casado te conocí,
casada tú estás,
sueño siempre contigo,
“igual que tu conmigo”.

Cuando estoy con ella,
y acaricio su cuerpo,
me lleno de pasión,
“me excito por tu deseo”.

Como si fueses tú,
ay mi amor,
amor mío deseado,
“ cuerpo ajeno amado”.

Si fuese tan fácil
poder acariciarte suavemente,
tu corazón me pertenece,
“aunque sea en mi mente”.

Siento que al besarte,
te hago estremecer,
aunque te goce tu marido,
“pero mi deseo es prohibido”.

El es el dueño ,
de todo tu cuerpo ,
cierro los ojos,
“siento que me muero de celos”.

Sólo el pensar,
que posee mi deseo,
aunque nos deseamos,
“pero estamos alejados”.

Tú y yo,
estamos tan enamorados,
como dos adolescentes,
“que se dejan llevar impulsivamente”.

No hay nada que les moleste,
sin pensar en nadie más,
así es este mundo,
“sufriendo por este amor prohibido”.

Ya tenemos dueños de cuerpo,
pero estamos libres en la pasión ,
que sentimos los dos,
“dentro de nuestro corazón”.

Este amor nuestro,
es un amor prohibido ,
es un bendito pecado,
“estar así los dos poseídos”.

Somos dos locos,
dos locos enamorados,
pero estamos casados,
“aunque sea un grave pecado”.

Error de Cupido ,
por nosotros sufrido ,
yo te amo,
“tú me amas en pecado”.

Pero tenemos la barrera,
la barrera del matrimonio ,
amor es amor,
“aunque estamos en matrimonio equivocado”.

Estamos los dos enamorados,
que cruel es esta vida,
pero a su vez bendecida,
“como premio a esta vida”.

La luna es testigo ,
de nuestras peticiones,
consuelo de amores,
“mi corazón te entrego”.

Miguel de la Mancha
( poeta y escritor )

Sentir los celos,
que horrible sensación,
un profundo dolor,
“fruto básicamente de imaginación”.

Se transforman al sentir,
la falta de personalidad,
perdemos toda la confianza,
“con la persona que nos hace feliz”.

Será que al sentir,
nuestra pareja o amada,
hable tan cariñosamente,
“sentimos la sensación equivocada”.

Podemos sentirnos desplazados,
y nos da miedo perder,
el ser querido,
“yéndose de nuestro lado”.

Nos atemoriza pensar,
que regale ese cariño,
y por qué nos sentimos así,
“sentir con los celos es estar en inseguridad”.

Debemos de estar seguros,
saber a quién tenemos,
y poseemos a nuestro lado,
“ser felices y que nos amemos”.

Si ese es nuestro amor,
nuestro gran confidente,
porque le tenemos desconfianza,
“si son nuestro presente”.

Sin ningún motivo,
solo por inseguridad,
Sin motivo ninguno,
“ese miedo a perderlos de verdad”.

Cambiemos esa forma de ser,
ese corazón nos pertenece,
nosotros le pertenecemos,
“de nuestro amor no desconfiemos”.

Por qué dudamos sin razón,
si siempre está a nuestro lado,
nuestro fiel enamorado,
“nos regala su cariño siempre entregado”.

Sus besos apasionados,
son los más entregados,
nos alivia con sus labios,
“nuestra sed de amor deseado”.

No permitamos nunca,
que nuestra imaginación,
siembre inseguridad y miedos,
“arruinen nuestra hermosa relación”.

Sería triste y doloroso.
si no hay motivo alguno,
dudar de ese amor,
“desconfiar de un amor hermoso”.

Si nuestra imaginación vuela,
que sea de pasión,
y no de tormento,
“dejemos los celos por el momento”.

Amémonos como posesos,
y no peleemos por inseguridad,
lo más bonito del amor,
“ es saberse amar y comprenderse los dos”.

No crear desconfianza,
ni llegar a dudar,
de esa maravilloso camino,
“que nos unió el destino”.

El camino del amor,
que iniciaron juntos,
hagamos desaparecer ,
“los celos para enloquecer”.

Ese fantasma terrible,
no dejemos de vivir,
alojarse en nuestra mente,
“que nos impida de vivir feliz”.

Que no hay nada,
más hermoso y placentero,
que la libertad y confianza,
“dentro del amor sincero”.

Si se siente celos,
y los dejamos de crecer,
es toda una perdición,
“amémonos los dos sin ninguna condición”.

Seamos bien dichosos,
hagamos el honor,
de amarnos y no celarnos,
“como al principio de enamorarnos”.

Hagamos el amor con pasión,
disfrutando este gran amor,
que sentimos los dos,
“como una gran bendición”.

Miguel de la Mancha
(poeta y escritor)

El sicario de las palabras,
dulces y tentadoras,
palabras que enamoran,
corazones que lloran,
“suspirando faltos de amor”.

Soy el sicario ,
sicario del amor,
mis palabras te llenan,
ilusionando tu corazón,
“soñando con el amor “.

Soy el sicario ,
mi oficio es escribir ,
llenar con mis palabras ,
eliminando el vacío del dolor,
“que habita en tu corazón”.

Soy el sicario ,
mi legado es hacerte sentir,
sólo con mis palabras ,
el modo de enamorar,
“haciéndote sentir y suspirar” .

Soy el sicario ,
yo reparto felicidad,
y hacer de soñar,
eliminar el pasado,
”convertido en pesadilla continua”.

Soy el sicario ,
testigo de la felicidad ,
lee mis versos,
donde fluye el amor,
“y desaparecerá el dolor”.

Soy el sicario,
sicario de la verdad,
en estas palabras,
te las entrego todas,
“entre ellas va la felicidad” .

Soy el sicario ,
testigo del amor,
“te mato” con mis palabras,
mostrándote en realidad,
“ el maravilloso arte del amar”.

Soy el sicario,
asesino las tristezas,
desaparezco los temores,
soy fiel al amor,
”reviviendo los grandes amores”.

Soy el sicario,
que vive para la felicidad,
eliminando de este mundo,
los malos momentos,
”surgiendo en el amor profundo”.

Soy el sicario,
que sobrevivo con la felicidad,
disfrutando de la pasión,
expresada en estos versos,
“generando muchos abrazos y besos”.

En esta vida todos,
en algún momento ,
somos sicarios del amor,
desperdiciamos el amor,
”convirtiéndolo en dolor y sufrimiento”.

Miguel de la Mancha
(poeta y escritor)

Ven a mis brazos,
no te ausentes más,
la vida es una,
“y no vuelve más”.

Deseo que nos fundamos,
en este fuego de amor,
hacerte prisionera del deseo,
“con un ardiente beso”.

En la cárcel de mis brazos,
que llevan derecho,
al calabozo de tus pechos,
“deseo estar allí preso”.

Viviendo el dulce momento,
cumpliendo la condena de amarte,
con mi amor poder enfermarte,
“para toda la vida poder curarte”.

Como lo estoy yo,
una enfermedad terminal,
como es este cáncer de amor,
“no deseo curarme de este bendito amor”.

Disfrutemos los dos,
esta enfermedad compartida,
que nunca tenga heridas,
“pero que sea bienvenida”.

Que no tenga desconfianza ,
que los celos no infecten,
y nos pierda la razón,
“ para destruir nuestro amor”.

Que cada día,
sea más eterno,
más dulce y maravilloso,
“más sensual y más tierno”.

Que mis labios sean
la fuente que pueda,
saciar tu ser alocada,
“con mis labios saciada”.

Que mi cuerpo sea caldera,
para que ardamos de calor ,
en este fuego de amor y pasión,
“el ardiente fuego interior”.

Estar unidos los dos,
tú para mi,
yo para ti,
“en esta vida hasta el fin”.

El uno para el otro,
que nada ni nadie,
nos pueda separar,
“por siempre jamás”.

Unidos en este mundo,
seleccionados por cupído,
por esa flecha,
“que nos ha escogido”.

Feliz por habernos unido,
en este paraíso perdido,
acompáñame en este viaje,
“un viaje sin retorno”.

Con destino la felicidad,
con billete de ida ,
prepárate que se nos escapa,
“el turno de la felicidad”.

La vida es una,
una línea directa
llamado vida de dicha,
“una dicha llena de felicidad”.

Miguel de la Mancha
(poeta y escritor)